domingo, 25 de enero de 2009

El paraiso estaba entre tus manos




Perdona que te mienta cuado duermo

pero es que tu recuerdo se pasea

por entre los suburbios de mi mente

y se pierde en la boca de metro

de la calle adyacente a mi memoria.

Entonces yo me muero de repente

esperando, sentada en el andén,

resucitar al día siguiente.

14 comentarios:

Moony-A media luz dijo...

No tiene que perdonarte nada, tu haces lo que quieres en los sueños. Hasta resucitar.
Y, no, niña, no. El paraíso no estaba entre sus manos. Si lo hubiera estado, tú estarías entre ellas. Entre sus manos sólo había un espejismo.
El paraíso, te está esperando.

Un beso enorme, mi niña.

Por cierto, cada día eres mejor...

Anónimo dijo...

Es de lo mejor que he leído ultimamente, pruro sentimiento .

Te dejo un beso y un sentimiento .

Anónimo dijo...

Bonito. Todo.
Saludos.

Eme dijo...

sencillamente, maravilloso ;)

besos angelusa.!

Anónimo dijo...

No sé, es tal como te lo dije... prosa y poesía, este poema es... en fin.

Besos X s al cuadrado

almena dijo...

Bello! se interna en lo más recóndito del ser, en los meandros de la mente y de los sentimientos...

Un abrazo!

Anónimo dijo...

Resucita!
un beso

Malone dijo...

que a gusto estoy en tu riconcito disfrutando de tanta belleza!
un besazo

Ángela dijo...

Bueno, pues muchas gracias a tod@s. Y sí, BRUJILLA, resucito:-))

Besos.

Anónimo dijo...

pura sensualidad!

Ángela dijo...

¿Tu crees, Rural?

Clarice Baricco dijo...

Muy lindos poemas e imágenes tiene tu casa. Se sienten.

Lindo conocer tus letras.

Saludos agradecidos.



Graciela

ralero dijo...

Los sueños, Angelusa, nunca mienten ni hay que pedir disculpas por ellos.

Eso sí, dan juego para poemas que llegan al corazón. Como éste.

Un beso.

Ángela dijo...

Clarice, muchas gracias, es un honor recibirte aquí. Pero véase que tu blog no tiene desperdício.

El éxodo, los sueños no son más que realidades disfrazadas para la ocasión, lo sé.

Gracias por vuetras palabras. Así da gusto seguir.

Besos a ambos.